Accidentes en medios acuáticos, un método para evitarlos

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accidentes infantiles, natación infantil, medidas para evitar accidentes en piscinas

Accidentes en medios acuáticos, un método para evitarlos

No nos cansaremos de repetir que los accidentes son eso, accidentes y por tanto evitables. Nuestros amigos de Lenoarmi expertos en actividades en el medio acuático desde la más temprana edad, editan desde hace varios años una tarjeta de vigilante. Además de unas recomendaciones de seguridad que nos parecen de lo más interesantes y os reproducimos a continuación.

 

Recomendaciones de seguridad:

En piscinas:

  1. Visibilidad continua: No hay sustituto de la supervisión de un adulto, por eso la estricta vigilancia y el control permanente son básicos. Si son varios los adultos en casa, recomendamos que se nombre un responsable de la supervisión o hacer turnos de vigilancia, de lo contrario se puede caer en el error de confiar en que otro está observando a los niños y no es así.
  1. Norma 10/20: Cada 10 segundos el adulto responsable de la vigilancia debe mirar a la piscina para ver si hay niños dentro o alrededor de ella y debe llegar en menos de 20 segundos. Evitar cualquier distracción. 
  1. Asegúrate de que en ningún caso el pequeño puede llegar hasta el agua por sí solo ante un descuido.
  1. Se instalarán elementos de seguridad que eviten que el niño pueda llegar a la piscina, tanto en el interior de la casa como en el exterior (vallas, cubiertas, alarmas,…etc.). 
  1. Los niños deben aprender cuanto antes a flotar primero y a nadar después. Aun con este aprendizaje, no olvidar que posibles accidentes como caídas y golpes o una mala digestión, pueden alterar la consciencia del pequeño. 
  1. Disponer de dispositivos de rescate: tener a mano equipos de rescate básico como un salvavidas, una pértiga y un teléfono. 
  1. Recoger los juguetes y otros elementos de flotación que puedan resultar llamativos para el niño. Estos deben mantenerse alejados de la piscina y sus alrededores después de su uso, con el fin de evitar accidentes si el niño intenta alcanzarlos. 
  1. Drenajes de la piscina: la revisión y el mantenimiento de estos elementos, así como el alejamiento infantil de las partes mecánicas y de los filtros de la piscina son las mejores medidas preventivas para evitar lesiones o inmersiones excesivas por la succión mecánica sin posibilidad de salir a la superficie. Los adultos deben conocer cómo desconectar estos dispositivos.
  1. Emergencias: los adultos y los niños deberían aprender RCP (Reanimación Cardiopulmonar), así como interiorizar el procedimiento en caso de emergencia por ahogamiento: PASO, teléfono de emergencia (112) y actuación de seguridad.
  1. Problemas digestivos (diarreas,…etc.), de piel y ojos pueden ser provocados por los productos químicos que se añaden al agua. Los responsables deberían informar de los valores de desinfectantes y pH del agua cada día.

 

Recomendaciones de seguridad:

Las normas de seguridad deben estar visibles en un cartel informativo en todas las piscinas colectivas.

En aguas naturales: (Nadar en aguas naturales es diferente de nadar en una piscina) y por lo tanto requieren otros cuidados:

 Estate alerta a:

  •  Cambios inesperados en la temperatura del aire o agua. 
  • Corrientes, olas y aguas de desplazamiento rápido, incluso en aguas poco profundas. 
  • Peligros como diques, obstáculos sumergidos, rocas o sedimentos que se desplazan por la superficie o en el fondo del agua. 
  • Vida submarina, tal como vegetación que podría enredarse en los pies o atrapar animales que habitan dentro o cerca del agua. 
  • Descensos repentinos del nivel de agua. 
  • Navegación. 
  • Infórmate sobre posibles peligros en la zona que visitarás y toma las precauciones necesarias. 
  • Mantente alerta a las señales de mal tiempo y abandona el agua al primer indicio de truenos y relámpagos. 
  • Nada únicamente en áreas designadas. 
  • Supervisa a los niños de forma activa y constante, sin distracciones, cuando estén cerca del agua. Mantente siempre a un par de pasos de quien no nada bien. 
  • Haz que los que no sean buenos nadadores utilicen un chaleco salvavidas aprobado por la CEE, siempre que estén dentro o cerca del agua. No dependas de los flotadores hinchables para los brazos ni de los juguetes inflables. 
  • Siempre has de nadar con alguien, nunca en solitario. 
  • Métete con cuidado y con los pies primero en aguas desconocidas o poco profundas. 
  • No te tires al agua desde un lugar alto como un árbol, el borde de un acantilado o un puente. 
  • Los lagos, ríos y océanos pueden contaminarse. 
  • No tragues agua. 
  • Siempre que no encuentras a un niño, busca primero en el agua. 
  • Mantente fuera de peligro. En la mayoría de los casos, sólo los profesionales capacitados deben realizar rescates acuáticos. 
  • Aprender a nadar bien lleva tiempo. No esperes que los niños aprendan a nadar con unas pocas lecciones o incluso en una temporada.

 

Tarjeta del vigilante

Y para que esta vigilancia sea eficaz en Lenoarmi proponen una tarjeta de Vigilante muy práctica que por un lado señala los compromisos del vigilante y por otro, intenta ordenar y repartir esta gran responsabilidad que es el cuidado de los niños.

 

Los compromisos del vigilante son:

  1. Vigilar constantemente a los niños que se encuentran en el agua durante el tiempo acordado con el resto de los padres.
  2. No manipular teléfonos móviles mientras está vigilando.
  3. No leer la prensa ni revistas mientras está vigilando.
  4. No dormir mientras está vigilando.
  5. No charlar mientras está vigilando.
  6. Asegurarse de que otra persona ha iniciado su compromiso de vigilar antes de dejar de hacerlo.
  7. Asegurarse de que el nuevo portador de la credencial lea y entienda los puntos anteriores.

 Os dejamos un link para que podáis descargaros esta tarjeta de identificador del vigilante y disfrutéis de unas vacaciones felices y sin accidentes.

 

 

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